El Caballo Criollo Colombiano es un animal dotado por naturaleza con unas características muy propias en términos de fenotipo, genotipo, suavidad en su andar, reunión en su desplazamiento, cadencia, continuidad y en algunas ocasiones una alta frecuencia en la ejecución de sus movimientos, entre otras condiciones que lo convierten en el caballo de silla mas suave el mundo. 

Los ejemplares que gozan de un alto nivel de calidad por naturaleza son muy especiales y por lo tanto valiosos; el proceso de crianza, levante, arrendamiento y cuando lo amerita, entrenamiento para competencias, dura varios años y si bien la calidad la tienen desde el nacimiento, es gracias a una buena guía o educación y entrenamiento que alcanzan un alto nivel competitivo.

Pero también hay unas técnicas y procedimientos que pueden hacer que un animal brille con mas luz que la que en realidad tiene y esto se conoce como “habilitación”, pues hay animales que son nobles, responden bien al trabajo, pero no tienen tanta calidad como muy hábilmente sus preparadores y exhibidores lo hacen ver. Es apenas lógico y entendible que todos los caballistas quieran tener un animal competitivo de gran calidad y si bien el nivel promedio de la producción de este tipo de equinos ha evolucionado a pasos agigantados, también es cierto que el porcentaje de animales de alto nivel es menor al que todos quisieran. 

Hay técnicas que logran gran vistosidad y esto en algunos casos logra confundir hasta los más expertos criadores pues un caballo bien entrenado, bien manejado por su boca y con buena alimentación y suplementación, puede mostrarse mejor de lo que en realidad es; hay animales que encandelillan pues literalmente los pulen en sus movimientos y presentación a un nivel que no es natural en ellos pero que permiten mostrarlo con éxito así sea temporalmente.

 Y por ser solo un arreglo temporal es que no se considera real el nivel de calidad que muestran, pues al disminuir los entrenamientos específicos y las técnicas tan inmediatistas y efectivas, el animal vuelve a su nivel real de calidad y en muchos casos hay grandes decepciones. Se han visto casos de animales campeones que son adquiridos por criaderos importantes y al pasar de unos días, el animal disminuye el nivel en el que se compró y vuelve a su nivel real, por no continuar con ese proceso de habilitación que no es duradero en el tiempo y por ende no es real.